Si has escrito “parquet” mil veces, no estás solo. La ortografía de este término arrastra historia, usos profesionales y confusiones. La RAE ya tiene una respuesta clara y las consecuencias llegan a presupuestos, informes técnicos y contratos.
Qué dice la RAE y por qué importa
La forma recomendada en español es «parqué». El motivo es lingüístico: el término original es francés y el español lo adaptó con acento gráfico para reflejar su pronunciación y su ritmo acentual. Es un caso parecido a carné o sofá, donde la tilde guía la lectura.
La forma preferida en español es «parqué». El plural es «parqués». Si se usa «parquet», conviene marcarlo como extranjerismo.
Esta distinción no es menor. En documentos públicos, memorias de obra o pliegos, usar la voz adaptada evita reparos formales y transmite dominio del registro. En prensa, manuales y material docente, la recomendación unifica criterios y reduce ambigüedades.
De Versalles a tu salón: origen de la palabra parqué
El término nace en la Francia de finales del siglo XVII, cuando los artesanos reemplazaron el mármol por entarimados de madera dispuestos en patrones. Aquella solución embellecía, aislaba y facilitaba el mantenimiento. La etiqueta de oficio fue “parquet de menuiserie”. Con el prestigio del estilo francés, la palabra viajó por Europa y entró en castellano.
Adaptación al español: tilde, acento y plural
El español ajustó la voz a su ortografía: parqué. La palabra es aguda y termina en vocal, de ahí la tilde. En plural, añade -s y mantiene la tilde: parqués. Esta pauta refuerza la pronunciación y evita que el lector desplace el acento hacia la primera sílaba.
Parqué: palabra aguda con tilde por terminar en vocal. Plural regular: parqués. Pronunciación con acento en la última sílaba.
Cuando se opta por la forma francesa «parquet», se considera extranjerismo no adaptado. En textos formales se marca tipográficamente para indicar que entra como préstamo. Esta señalización ayuda al lector y respeta las normas de estilo.
Qué pasa en otros idiomas
La diversidad de formas en Europa explica parte de la confusión. Cada lengua gestionó el préstamo a su modo, con o sin adaptación ortográfica.
| Idioma | Forma habitual | Observación de uso |
|---|---|---|
| Francés | parquet | Origen del término; acento final en francés. |
| Inglés | parquet | General en catálogos y arquitectura; pronunciación anglicizada. |
| Italiano | parquet | Se mantiene la grafía francesa. |
| Catalán | parquet | Uso extendido en reformas y diseño. |
| Gallego | parquete | Adaptación a la morfología propia. |
| Portugués | parquete | Variante asentada en manuales y comercios. |
| Alemán | Parkett | Adaptación con doble t final. |
| Español | parqué | Forma recomendada; «parquet» como extranjerismo marcado. |
Cómo escribirlo según el contexto profesional
- En contratos, memorias y presupuestos: usa «parqué» para unificar criterio y evitar objeciones de forma.
- En catálogos bilingües: prioriza «parqué» y añade «parquet» solo si citas la denominación comercial original.
- En comunicación externa: no mezcles en un mismo documento «parqué» y «parquet» salvo que describas un nombre de marca.
- En SEO y fichas de producto: incluye ambas grafías como palabras clave, pero mantén «parqué» en los textos visibles.
Si nombras el material genérico, «parqué». Si copias una denominación comercial extranjera, cita «parquet» como tal.
El oficio que pide nombre: «parquetista»
El sector de los suelos de madera reclama el término «parquetista» para identificar al profesional que instala, lija, acuchilla y mantiene estos pavimentos. La petición busca visibilidad, formación reglada y categorías laborales claras. Para la ciudadanía, distinguir este oficio evita encargos difusos y mejora la calidad de las obras.
Impacto para empresas y consumidores
La normalización de «parqué» y el reconocimiento de «parquetista» ordenan el mercado. Las empresas acotan responsabilidades y procesos. Los usuarios saben a quién pedir un encolado, una restauración en espiga o un sellado de juntas. El lenguaje preciso reduce incidencias, ahorra visitas técnicas y facilita garantías.
Claves rápidas para no fallar
- Escribe «parqué» para el material y el acabado del suelo en español.
- En plural, «parqués». Evita «parquets» si redactas en español.
- Reserva «parquet» para citas textuales, marcas o textos en otra lengua.
- En informes técnicos, mantén coherencia: una forma por documento.
- Si dudas, recuerda: acento final y tilde en «parqué».
Más allá de la tilde: lo que te conviene saber si vas a instalar parqué
El término correcto no elige por ti el sistema de colocación. A la hora de contratar, pide que te detallen el patrón (tablilla, espiga, punta hungría), el tipo de madera (roble, nogal, jatoba), el soporte (flotante, encolado, clavado) y el acabado (barniz al agua, aceite, cera). Cada variable cambia mantenimiento, precio y tiempos de obra.
- Patrón y estabilidad: las espigas distribuyen tensiones y se comportan bien en estancias amplias.
- Soporte y acústica: el flotante con manta mejora el confort sonoro, pero el encolado transmite más solidez al paso.
- Acabado y uso: un aceite penetra y permite micro-reparaciones localizadas; el barniz protege mejor frente a manchas domésticas.
- Clima y juntas: la madera se dilata y contrae. Exige juntas perimetrales y control de humedad ambiental.
Errores frecuentes que se evitan con una buena redacción del encargo
- Confundir laminado sintético con parqué de madera. Exige ficha de material y espesor de capa noble.
- Omitir el sentido de la tablilla respecto a la luz. Afecta a la percepción del espacio.
- No especificar clase de uso en zonas de alto tránsito. Acelera el desgaste.
- Olvidar la compatibilidad con suelo radiante. Algunas especies y adhesivos no convienen.
Redacta el pedido con precisión: madera, patrón, soporte, acabado y mantenimiento. Una palabra exacta evita tres visitas de corrección.
Preguntas que te harás al escribirlo
¿Puedo usar «parquet» en un folleto? Sí, si reproduces una marca o un texto en otro idioma; en español general, mejor «parqué». ¿Cómo pluralizo? «Parqués». ¿Qué hago con documentos antiguos? Mantén su forma por respeto de archivo y aplica «parqué» en nuevas ediciones. ¿Y en búsquedas de internet? Usa ambas grafías como términos de búsqueda, pero escribe «parqué» en el contenido editorial.
Información útil para ampliar el tema
Si trabajas con terminología de la construcción, conviene familiarizarse con familias afines: tarima maciza, multicapa, laminado HPL, tablero OSB, contrachapado. Cada uno tiene procesos de instalación distintos y requisitos de dilatación propios. Para comparar soluciones, solicita muestras físicas y pide una prueba de rayado y otra de mancha con productos domésticos habituales. Esa simulación te dará pistas sobre el mantenimiento real que asumirás.
Por último, considera actividades conexas que mejoran la vida útil del parqué: control higrométrico previo a la obra, barreras de vapor en plantas bajas, felpas en puertas de acceso, y fieltros en mobiliario. Son decisiones pequeñas que protegen la inversión y evitan reclamaciones posteriores, tanto si lo escribes con tilde como si primero lo pensaste en francés.








